domingo, 30 de junio de 2019

LA MARINA A MITJAN S. XIX: CANVIS AGRÍCOLES I EL MASCLISME DE SEMPRE

L’any 1853 va aparèixer una petita novel·la, anomenada El Cultivo del arroz en los campos del Hospitalet del Llobregat o Los Filántropos. A la portada afegeix: novela histórica escrita por D. P. B. Y. R. i que fou editada a Barcelona per la Imprenta de Juan Roger. Ja vaig parlar d'ella a l'article L'Hospitalet als llibres antics.
L’obra tenia com a finalitat principal divulgar els efectes negatius que el conreu de l’arròs tenia per la salut dels habitants de la comarca. 
Com és conegut, pel conreu d’aquesta planta cal embassar aigua, i encara que la microbiologia no estaba gens desenvolupada, ja aleshores es relacionava l’existència dels estanys amb el paludisme, malaltia endèmica en el Delta del Llobregat.
L'autor conversa amb un noi que viu a la Marina, territori que podem veure al darrere. Pg 9 d'El cultivo...
 
En les seves pàgines es descriu l’ermita de Bellvitge i els camps de la Marina de l’Hospitalet, que aleshores arribava al mar. Hem de destacar que fa el relat amb una idealització de la vida pagesa, pròpia dels burgesos benestants que no patien la duresa de les feines del camp. De tot el contingut del llibre podem deduir que l’autor era força conservador.
Del contingut del llibre destaquem dos aspectes: en primer lloc, la descripció que fa de la Marina i Bellvitge, els conreus, etc.; en segon lloc, el relat que fa d’una familia pagesa, i en concret de com s’ha d’educar dues noies.
La Marina, l’ermita de Bellvitge i els conreus
El conreu de l’arròs va produir grans debats en les dècades centrals del segle XIX. Per una banda era molt productiu, i era impulsat pels burgesos que estaven fent del Delta del Llobregat l’avantguarda de l’agricultura del país. A la novel·la, l’autor els anomena “els filantrops”.
Tanmateix, el conreu de l’arròs afavoria la difusió del paludisme. En aquells moments, els pagesos de la Marina buscaven nous conreus (de regadiu, gràcies al Canal de la Infanta) per incrementar els guanys, i finalment van optar pel blat de moro. En aquest sentit, molt interessants els esments que hi ha al text de l'explotació del cànem i els joncs.
Portada de la novel·la
 
Del text hem respectat la ortografia original, però hem canviat un aspecte: hem dividit els paràgrafs molt llargs. Els destacats en negreta també són meus.
“Á muy poca distancia de la capital del Principado, se hallaba erigido aquel santuario de la Virgen, el cual junto con la habitación del hermitaño que lo tenia á su cargo, formaba un cuadrilongo, y en su parte esterior existia una cerca de piedra que rodeaba la terraplen del edificio, y á uno de sus lados un pozo de muy poca profundidad, que puesto al abrigo de las varias enredaderas que en forma de emparrado lo cubrian, contenía en su seno un esquisito manantial de agua, tan sumamente fria que en los meses mas calurosos del verano, contribuía á hacer en sumo grado deliciosa aquella situación.
Desde aquel punto, se descubrian aquellas tristes y melancólicas llanuras, que serán siempre un perenne testimonio de los límites donde se circunscribió la ambicion humana; las cuales se ofrecian á la vista de aquel templo, como á un sitio escogido por aquellos primeros solitarios que alimentados con el suave bálsamo de la religión, desde aquel sagrado recinto debian levantar su vuelo como las águilas de la montaña.

La corriente del caudaloso rio Llobregat bañaba las faldas de aquellos montes cercanos que se descubrian á lo lejos y formaban el mas delicioso panorama, esparciendo sus aguas y convirtiéndolas en pequeños saltos y canales, que nutrian y fertilizaban las columnatas de árboles blancos y de olmos, cuyas ramas bamboleaban con el peso de una infinidad de uvas que servian para apagar la sed de aquellos infelices cultivadores, colocados por la mano del Creador en aquellas soledades.
Los estensos límites de estas llanuras desaparecieran con el horizonte al través de la encantadora y risueña perspectiva que ofrecian los pueblos sitos á lo lejos de aquel contorno.El religioso silencio que reinaba en aquel Santuario, hacia el mas curioso contraste con los reiterados toques de la campana, y con el bullicio de gentes que de aquellas llanuras acudían á él, durante aquel señalado dia del año en que se celebraba la fiesta de aquella su tutelar Vírgen, entonándose con el dulce y armónico concierto de los instrumentos los Divinos oficios, quedando así simbolizada la memoria de lo pasado, con la alegria de lo presente, perpetuándose el regocijo de aquella festividad de generacion en generacion.
Ermita de Bellvitge, amb l'habitatge dels ermitans en primer terme, l'any 1926.
Los umbrales de aquel venerable sitio se hallaban atestados de una infinidad de familias labradoras de los puntos cercanos que acudian á él para invocar el auxilio de aquella celestial Vírgen, suplicándola que no apartara jamás la luz de aquel fanal, que incidido por la mano de la providencia, nos hace precaver de los escollos de la tierra.
(…)Pasé pues aquella noche, recogido en la casa ó habitación del ermitaño de aquel Santuario, cené con la familia de dicho ermitaño, y mientras que este estaba velando con el candil á su lado, concluyendo unas alpargatas, producto del trabajo que le daba el sustento, yo me retiré á mi aposento esperando que luciera el dia para volver á disfrutar de las dulces sensaciones que inspiraban á mi corazon los atractivos de la vida rústica.
L'ermita de Bellvitge en una imatge publicada el 1891

Al dia siguiente, y cuando los primeros rayos del sol alumbraban la cima de los montes cercanos, y todas aquellas llanuras habian revivido con el movimiento de sus pocos moradores, poniendo en juego los mozos sus herramientas, y aparejando las caballerías para trasladarse al campo á continuar las labores que habian dejado suspendidas en el dia anterior, se veian por otra parte varias muchachas, que atravesando aquellos desiertos llanos en distintas direcciones, conducian á la plaza del mercado canastos de fresca verdura y sabrosísimas frutas, donde las gotas del rocío todavía centelleaban sobre las mismas; entonces fue cuando movido de una especie de curiosidad, tomé la resolucion de internarme por aquellas llanuras, donde apenas se encontraba una casa que pudiese ofrecer hospitalidad al viajero, viéndome aislado en un pais cual si me hallara en tierra estrangera; pues sobre ofrecerse como un vasto y dilatado desierto, se oía á lo lejos un sordo murmullo producido por la agitacion de los vientos y saltos lejanos de agua, que parecia que iban á estrellarse en sus bordes, las olas de las pasiones y las borrascas del mundo.

Cal Gotlla, un mas de la Marina de l'Hospitalet.
Los pantanos que se estienden hasta á poca distancia de los pueblos donde toman su nombre, se hallan cubiertos por medio de una calzada de juncos que constituyen un artículo de industria para algunas pobres familias que no tienen otro medio con que sustentarse, mas acercándose la estacion oportuna, acuden tambien allí varios labradores á enriar los cáñamos, dando así cumplida cima á las labores de los últimos cultivos del año. Apenas puede nadie separarse de la senda que rectamente dirije á aquellos pocos caserios, so pena de sumirse en los fangales, siendo muy difícil y algo arriesgado el andar de noche, y sin guía sin exponerse á alguna grave aventura.
En medio de aquel laberinto de terrenos húmedos y movedizos, y de balsas cubiertas de plantas acuáticas, verdaderas trampas siempre ocultas, y siempre abieras , hubo ocasiones en que no encontré medios para pasar delante, creyendo á cada vez frustrado el objeto de mi curiosidad; mas al cabo de algunas horas que llevaba de camino, encontré por fin una casa, que sin duda era á mi ver, de las que se distinguia mas de las de aquel contorno, y como era la ocasión en que tenia lugar la cosecha del maíz, tenían sus dueños amontonado en todo el patio y entrada de dicha casa, una inmensidad de panojas de este grano, que me obligaban á tener que encaramarme por aquellos montones, de suerte, que para salir de mis apuros hubiera sido preciso llevar los cinco sentidos a mis piés.”
El masclisme
El protagonista de la novel·la entra en aquest mas, i ens proporciona una lliçó de moral que ens mostra el masclisme dominant en aquella època. Hi són tots els tòpics: la felicitat de les dones proporcionada per la puresa i la ignorància, l’honor de les famílies basat en el comportament de les dones, la reclusió (que no pateixen els nois) com a forma de garantir la seguretat…
I tot plegat, amb un tocs de classisme que arrodoneixen la gal·leria dels horrors que significa aquest text.

Il·lustració de l'interior d'una casa a la pàgina 57 d'El cultivo.... Imaginem que és on viuen l'àvia i les dues noies. Aquestes imatges poden ser les representacions de persones de l'Hospitalet més antigues.
“Pasé todo el dia en aquella solitaria mansión, observando las ocupaciones y faenas á que se dedicaban dichos campesinos, admiraba sus anchos calzones y ligeros trages (…).
Al dia siguiente que era de descanso por ser domingo, observé asi mismo que dos de los jóvenes de la casa, salian muy de mañana vestidos ya con los trages del dia de fiesta, y que con paso bastante veloz se dirigian segun pude colegir, á uno de aquellos pueblos cercanos, donde se celebraba la fiesta tutelar de su patrono, á la cual concurria un gran numero de labradores y familias de diferentes puntos, para disfrutar del bullicio y animacion que por lo regular reina en esta clase de regocijos, á donde acuden los ociosos, aventureros, jugadores y danzantes.
Segadors als encontorns de Barcelona; Mundo gráfico, 16-7-1913

Era la familia de aquel labrador, compuesta de una abuelade noventa años, de su hijo viudo, y dos nietas hijas de este último. Parecia que las dos muchachas no gozaban en todo el año ni un dia siquiera de recreo, así es que no perdiendo de vista la oportunidad que me ofrecía el poder dirigir mis palabras á la mayor de dichas muchachas, le pregunté si pensaba ir aquella tarde y siguiente noche á disfrutar de aquellos regocijos; mas al punto me contestó la abuela negativamente, conociendo con el tono y ademanes de dicha contestación, que estaba decidida á no consentirlo, pues dijo, que nadie podía sin escándalo asistir á tales reuniones, donde bajo figuradas formas se introducía la desmoralizacion de la juventud, se turbaba la quietud en las familias, se aniquilaban las fortunas, y por fin se robaban la tranquilidad de todos los dias del año; el cielo dijo la abuela, no dejará impunes á los padres de familia que permiten que sus hijas se presenten con orgulloso rostro á cautivar los corazones, ostentando bajo pretesto de ahorros, pañuelos de encages, zarcillos de oro y otros varios adornos, impropios de su clase, mancillando así el nombre de las familias, y colocándose á una esfera que solo está reservada para las clases mas distinguidas de la sociedad.

No me atreví a contrariar la resolucion tomada por aquella abuela con semblante algo incomodado, mas las dos muchachas estaban contentas y quietecitas, gozando de una felicidad hija de la inocencia y de su pureza, entregadas á los dulces recuerdos de sus primeros años, ignorando los goces de esta vida, empero tampoco conocian las lágrimas que se vierten en el silencio y la soledad.

Aquella abuela era su segunda madre, á la cual consagraban todos sus pensamientos, todas las alegrias de su alma joven y la amaban por cariño y por obligacion; así como tambien ella velaba incesantemente para que nunca la vil corrupcion empañara aquella venturosa inocencia y cándida sencillez; guardaos hijas mias les decia, guardaos de traspasar estos límites, señalándolas aquellas llanuras, sino quereis encontrar monstruos y peligros; guardaos de traspasarlos en busca de una felicidad que la Providencia tiene puestos sus diques contra sus avenidas, para que las frenéticas pasiones no lleguen jamás á enseñorearse de vuestros cándidos corazones.

A estas palabras, aquellas cariñosas muchachas humillaron sus rostros desprendiendo de sus dulces labios una graciosa sonrisa, mostrando con sus ademanes cuan contentas y felices vivían en aquella solitaria mansion, donde era el domingo para ellas un dia de descanso, ó por mejor decir de placer."